Todas las tiendas de cocinas Santos siguen teletrabajando con la mirada puesta en el futuro
30 / 04 / 2020
El pasado 14 de marzo se declaró, en todo el territorio español, un estado de alarma orientado a contener y mitigar los efectos de la crisis sanitaria provocada por la pandemia del coronavirus COVID-19. Esto supuso, entre otras medidas restrictivas, la limitación de la circulación de personas y el cierre de establecimientos comerciales. Se inició así un periodo indefinido de confinamiento en el que muchos negocios, a pesar de no poder abrir al público, siguieron ofreciendo sus servicios a través del teletrabajo, como en el caso de todas las tiendas de cocinas Santos. Cinco estudios de diferentes puntos del país nos trasladan, a modo de ejemplo, sus experiencias para, a través de ellas, ayudarnos a comprender cómo están afrontando una situación sin precedentes: Clysa (Barcelona), Docrys & DC (Madrid), Misura Studio (Alicante), Santos Brezo (Madrid y Guadalajara) y Zona de Día (Santa Cruz de Tenerife).
Organizarse para manejar un escenario excepcional
Tras el impacto que supuso la declaración del estado de alarma, con la consiguiente imposibilidad de abrir los establecimientos o mantener la actividad en los lugares habituales de trabajo, las tiendas de cocinas Santos se volcaron en establecer procedimientos, sistemas y canales que les permitiesen seguir prestando sus servicios de forma telemática.
Desde Docrys & DC reconocen que, tras un breve momento de confusión inicial, a las pocas horas ya se encontraban todos en sus casas, organizándose y dando lo mejor de cada uno: «No sabíamos muy bien qué iba a pasar pero, cuando existe un buen equipo de trabajo, no hay nada que se resista. Mantenemos los protocolos de siempre, el único cambio es que todo es online».
El equipo de Misura Studio también trabaja desde casa, conectado en remoto con un servidor y los equipos informáticos del estudio: «Cada uno sigue realizando sus funciones, en permanente contacto con clientes y proveedores». Todo ello respetando una rutina de trabajo con un horario establecido, para mantenerse laboralmente activos en todo momento.
Sin duda, las nuevas tecnologías están desempeñando un papel determinante en estos momentos, como bien recuerdan desde Clysa: «Gracias a ellas, el equipo sigue en contacto y en funcionamiento desde sus casas. Además, al tener la tienda cerrada, toda nuestra fuerza comercial la estamos enfocando en las redes sociales».
Desde Santos Brezo explican que su sistema de gestión de proyectos con soporte online les permite seguir trabajando con normalidad, atendiendo todas las gestiones relacionadas con los proyectos de sus clientes. También destacan «el buen sistema de comunicación entre los distintos grupos de trabajo, que facilita una circulación fluida de la información».
Rosario Martín, gerente, administradora e interiorista de Zona de Día, reconoce que la situación apenas ha supuesto trastorno alguno para ella, ya que suele teletrabajar habitualmente desde su casa: «La primera semana del estado de alarma estuve en la tienda, realizando trabajo de apoyo para las presentaciones, y mis compañeras en sus casas. Luego pasamos una etapa todas en casa y, desde hace unos días, una compañera trabaja en la tienda porque ya no soportaba el encierro».
Contacto directo y permanente con los clientes
Los estudios procuran transmitir a sus clientes un mensaje de tranquilidad. Siguen activos y siempre a su disposición, incluso durante esta situación excepcional y pasajera, en la que la vuelta a la normalidad es solo una cuestión de tiempo. Los clientes, por su parte, han reaccionado al cierre de las tiendas con muestras de comprensión, apoyo, agradecimiento y confianza: «Nos han cerrado proyectos incluso sin saber cuándo podríamos ir a sus casas a tomar medidas para encargar las cocinas», aseguran desde Docrys & DC. Para Misura Studio, «lo importante es demostrarles que seguimos ahí, aunque sea en la distancia. Son comprensivos si demuestras que estás haciendo todo lo posible».
Las tiendas mantienen un contacto permanente con sus clientes, a través de todos los medios y herramientas disponibles: teléfono, correo electrónico, videoconferencias, servicios de mensajería, redes sociales, etc. De hecho, en Santos Brezo han notado que, «debido a las circunstancias que estamos viviendo, el contacto con nuestros clientes es aún más estrecho, adaptándonos todos al sistema de teletrabajo».
En este sentido, Clysa resalta la gran aceptación que han tenido las videoconferencias entre los clientes, ya que les permiten abandonar la monotonía de su encierro y sentirse mejor. «Además, han podido dedicar más atención a sus proyectos y tener un motivo de ilusión en estos días». En Misura Studio también han percibido esta realidad: «A pesar del confinamiento, los clientes están ilusionados con el cambio de cocina. Por ejemplo, una de nuestras clientas es directiva en un hospital y nos ha comentado que, cada vez que le enviamos una actualización de su proyecto, se olvida por un momento de la situación tan crítica que vive y se le alegra el día».
Uno de los aspectos que más ha cambiado es la presentación de los proyectos, que debe realizarse a distancia. Por ello, como afirman desde Zona de Día, la comunicación cobra aún más importancia: «Intentamos hacer presentaciones mucho más detalladas, para que el cliente disponga de más información sobre lo que ofrecemos. Ahora más que nunca, hay que sorprender al cliente. Es un nuevo modo de trabajo que, pese a sus impedimentos, está obteniendo buena respuesta». Desde este estudio también apuntan que «el confinamiento permite dedicar más tiempo a los proyectos, tanto a nosotros como a los clientes. Ahora responden a todas las preguntas que les realizamos, necesarias para elaborar una primera propuesta y remitírsela por correo. Esto se debe a que disponen de tiempo y concentración para hacerlo, y así es mucho más fácil acertar a la primera con lo que tienen en mente».
El mismo trabajo, nuevas motivaciones
La actual situación de las tiendas de cocinas Santos podría resumirse con una frase de Zona de Día: «Hemos cerrado la puerta, pero no hemos abandonado la actividad. Desde el día 16 de marzo no hemos parado». Videoconferencias para organizar y planificar el trabajo, recepción y desarrollo de proyectos, atención a clientes, seguimiento comercial, coordinación logística, administración, comunicación, implantación de sistemas de gestión, formación… Como aseguran desde Docrys & DC, «se mantiene el mismo espíritu y filosofía, lo único que ha cambiado es el lugar de trabajo».
Los cinco estudios coinciden en los aspectos que les resultan más difíciles de sobrellevar durante este confinamiento: la lógica preocupación derivada de una emergencia sanitaria global, con los riesgos e incertidumbres que implica, y la dificultad para avanzar en el desarrollo y ejecución de proyectos. Pero, sobre todo, lamentan la imposibilidad de compartir físicamente espacio y jornada laboral con otras personas.
Precisamente cuando surgen los mayores obstáculos, los momentos más duros y difíciles, es cuando cobra mayor importancia la presencia de un punto de apoyo que sirva de motivación y ayude a mantener la ilusión. Clysa encuentra esta fuerza en el hecho de «seguir desarrollando proyectos, mantener el contacto con nuestros clientes, y ver su ilusión por las propuestas que presentamos». Una manera de pensar compartida por Docrys & DC —«Incluso con esta situación de incertidumbre, seguimos cerrando proyectos y vemos cómo los clientes siguen confiando en nosotros»— y Misura Studio —«Intentas mantener la ilusión de que tus clientes quedarán contentos con el trabajo realizado, y eso es principalmente lo que nos impulsa a seguir mejorando y nos motiva»—. En Santos Brezo ponen el acento en la fuerza del equipo: «Aún en la distancia física, mantenemos el contacto y seguimos trabajando en grupo. Sabemos que esta circunstancia es temporal, y esperamos que en breve vuelva el contacto de tú a tú, el que más nos gusta». Y, en Zona de Día, han optado por transformar la situación en un gran reto: «Al tomárnoslo como tal, usamos todas nuestras armas para adaptarnos. Es la ilusión de sobrevivir, de adaptarnos a las nuevas circunstancias. Estamos aprovechando para seguir las tendencias, mejorar y realizar cada vez mejores proyectos de interiorismo».
Volver a abrir cuanto antes y con seguridad
Las tiendas comparten el deseo de volver a abrir cuanto antes sus puertas al público, y van dando forma a planes y acciones para afrontar la era postconfinamiento. Sin embargo, queda todavía un duro camino hasta ese momento, y son conscientes de que habrá que adoptar cambios y medidas que llegarán para quedarse.
En Clysa asumen que «la afluencia a las tiendas se retomará de forma escalonada, así que lo vamos a preparar todo según las recomendaciones y normativas, para que las visitas se sientan seguras y cómodas».
Antes de la declaración del estado de alarma, Santos Brezo ya había introducido medidas para minimizar los riesgos de los trabajadores y visitantes: «Esos medios serán rutinarios y se incorporarán más. Además de instalaciones físicas, como mamparas o sistemas de desinfección, se están instaurando procedimientos en todos los procesos internos. Todos nuestros procesos van a estar absolutamente controlados para garantizar la seguridad».
Desde Docrys & DC apelan a la calma y la responsabilidad: «Tenemos que hacerlo todo paso a paso. Ya hemos empezado a tomar medidas para ganar tiempo y que todo esté listo para la reapertura. Las reuniones con los clientes se realizarán bajo cita previa, dispondremos de mascarillas para visitantes y trabajadores, instalaremos dispensadores de gel higienizante hidroalcohólico en las entradas de nuestros estudios, y colocaremos mamparas de metacrilato en todas las zonas de trabajo y salas de presentaciones».
El plan de Zona de Día es «trabajar con las medidas de seguridad necesarias para ayudar a parar esta pandemia. Si nos adaptamos al confinamiento y seguimos ilusionados, la “nueva normalidad” será parecida. Los clientes no tendrán que venir a la tienda con cada cambio que se realice, pues somos capaces de hacer reuniones “virtuales”. Es verdad que para nosotros es un esfuerzo, pero lo estamos haciendo. Nuestro principal plan es ser capaces de adaptarnos y poder responder profesionalmente».
Para Misura Studio, las claves son la paciencia y la perseverancia: «Poco a poco esperamos volver a nuestro estado habitual de trabajo. Debemos ser mas creativos que nunca, sembrar todo lo posible durante este tiempo para, cuando todo esto pase, tener muy avanzados los proyectos. Será un proceso lento y duro, y seguiremos las recomendaciones de las autoridades competentes para asegurar tanto el bienestar de los clientes como el nuestro».
Reflexiones para encarar el futuro con optimismo
Por difícil que parezca, de una situación tan dramática también se pueden extraer lecciones positivas. Desde la necesidad de pensar en el presente con la mirada puesta en el futuro, como afirman desde Docrys & DC, a la importancia de conceder más atención a los detalles, como defienden desde Zona de Día, o el descubrimiento de nuevos procedimientos de trabajo que ayudan a mejorar el servicio, como en el caso de Santos Brezo.
El equipo de Misura Studio confiesa que este cambio abrupto le ha servido para tomar conciencia de que «vivimos tan deprisa que no nos da tiempo a valorar lo que tenemos, tanto a nivel laboral como personal. Esta situación nos ha hecho ser más conscientes de todo lo bueno que nos rodea, de lo que realmente es importante Tenemos que ver las cosas de una manera positiva, disfrutar más del día a día, e intentar aprovechar al máximo cada instante con la familia, amigos y compañeros de trabajo».
Por su parte, desde Clysa creen que esta situación ha permitido que las personas se conozcan mejor, algo que muy posiblemente redundará en una evolución de los hábitats: «Vivimos en un país en el que el clima y el entorno invitan a pasar mucho tiempo en el exterior. Pero ahora nos ha tocado vivir encerrados, mirando hacia adentro, conociéndonos y conociendo los espacios que habitamos, que para muchos eran un lugar de paso al que no se prestaba atención. Estamos convencidos de que mucha gente transformará y mejorará su hogar gracias a estas reflexiones».
Sin duda vivimos una época complicada, pero está claro que todos los estudios Santos han aceptado el envite y están dispuestos a salir de ella no solo airosos, sino incluso reforzados.
Desde Santos, agradecemos la participación en este reportaje de Raquel García y Aurelio García (Clysa), Rafael Fernández y Jose Doval (Docrys & DC), Esther Carmona y Ramón Arévalo (Santos Brezo), Ana Adela Tomás, José Lombardo Morales, Judit Aznar y Maribel Carrión Amorós (Misura Studio), y Rosario Martín Pérez (Zona de Día).
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